En la recién arreciada guerra contra pandillas y contra los “remanentes” de estas estructuras delincuenciales en todo el país por parte del Gobierno Central, recientemente se descubrieron armamento enterrado en algunos sitios, entre estos se cuenta un fusil de asalto del tipo AK en un Sonsonate.
La Policía Nacional Civil (PNC) dijo que encontró un fusil AK-47 el cual fue ubicado en una vivienda abandonada de Sonsonate, mientras que en su momento agentes de la PNC patrullaban los lugares a la zona evitando cualquier asedio por parte de las personas o pandilleros que dejaron con su suerte dicha arma.
En el sitio se encontró también 5 cargadores, 39 municiones, y 9 cartuchos para escopeta.
Las autoridades indicaron que los estudios científicos de este AK-47 determinarán en qué homicidios fue utilizada, o si fue utilizada en alguno, inclusive otros hechos delictivos.
“Vamos a desarticular y desarmar por completo a los terroristas”, consignó la autoridad policíal.
No se reportan capturas conocidas hasta el momento tras este hallazgo en una vivienda de Sonsonate.
Lo que sí es cierto es que los pandilleros califiados como terroristas están dejando enterrados o escondidas dichas armas, ya sean de fuego o armas blancas, ya que así evitan ser implicados en hechos criminales y delictivos, algunos, según se conoce huyendo a lugares distantes y alejados de las grandes ciudades donde en parte las autoridades como la PNC o la Fuerza Armada han despejado dichas zonas.