Hombres armados secuestraron en la noche del domingo a este lunes a 140 estudiantes en el noroeste de Nigeria, indicó un profesor, en el último episodio de una larga serie de acciones de este tipo contra centros educativos.
Los atacantes escalaron una verja para acceder al internado del colegio Bethel Secondary School en la localidad de Chikun del estado de Kaduna, donde dormían un total de 165 alumnos.
«Los asaltantes se llevaron a 140 estudiantes, y 25 lograron escapar», indicó a la AFP Emmanuel Paul, un profesor de la escuela.
El portavoz de la policía del estado de Kaduna, Mohammed Jalige, confirmó el ataque este lunes por la mañana, pero no ofreció detalles sobre el número de estudiantes raptados.
«Equipos tácticos de la policía han ido tras los secuestradores. Todavía estamos en la misión de rescate», afirmó.
Alrededor de 1.000 estudiantes han sido secuestrados en diferentes estados nigerianos. La mayoría fueron liberados tras negociaciones con autoridades locales, pero algunos siguen retenidos.
Grupos criminales que las autoridades denominan «bandidos» aterrorizan las poblaciones del noroeste y centro del país más poblado de África, atacando poblados, robando ganado y secuestrando a personalidades locales o viajeros para cobrar rescate.
Desde comienzos de este año, parecen haberse fijado como blanco escuelas, institutos y universidades.
Operan desde campamentos situados en el bosque de Rugu, que se extiende por los estados nigerianos de Zamfara, Katsina y Kaduna, así como por Níger.
Aunque actúan impulsados por el afán de lucro, algunos son allegados a grupos yihadistas presentes en el noreste de Nigeria, a cientos de kilómetros de distancia.