Como sabemos el aprendizaje de las habilidades socioemocionales y comunicativas comienza en los primeros meses del niño y continua durante toda su vida. Los niños aprenden estas habilidades fácilmente gracias a las experiencias tempranas de interacciones sociales en su entorno familiar, por lo que en casa es más fácil poder fortalecerlas.
En este artículo te damos 8 tips para poder trabajar estas habilidades.
1. Debes establecer reglas claras
Cuando los padres de familia enseñan reglas sociales a sus hijos, a ellos les resulta más fácil actuar de acorde al contexto y a la persona a la que se están dirigiendo. Por ejemplo, debes enseñarle que no se trata igual a un docente que a un familiar cercano.
2. Explicitación de lo que se espera de ellos
En ocasiones los niños no saben cómo actuar en determinadas situaciones, por eso es importante explicárselo. Por ejemplo, si ven que un amigo ganó un premio, lo correcto es felicitarlo.
3. Generar ambiente que fomente el diálogo
Es importante que haya espacio para conversar, compartir experiencias y emociones dentro del entorno familiar. Ej.: compartir una comida juntos. En ese momento no utilizar dispositivos electrónicos que obstaculicen la comunicación.
4. Conversación abierta sobre cómo tratar los conflictos
Ayudar a reflexionar a través de preguntas, sobre la situación que ha generado conflicto y cómo podría resolverla. La idea no es resolverle el problema o decirle lo que debe hacer, sino brindarle herramientas para que el propio niño los resuelva.
5. Apoyo y contención
Un niño que se siente contenido por su familia tendrá mejores habilidades interpersonales, pudiendo responder de manera adecuada en su entorno social: colegio, familia, amigos.
6. Expresión y comprensión de las emociones del grupo familiar
Si los padres expresan sus propias emociones, es más probable que el niño también lo haga. Además, los padres deben encontrar un equilibro.
7. Demostrarles todos los días amor y afecto
Si los padres son afectuosos y demostrativos, habilitarán al niño a hacerlo espontáneamente. Por ejemplo, diciéndole a tu hijo todos los días un Te Amo.
8. Fomento de la autonomía
Acompañar al niño permitiendo que pueda ir resolviendo de manera gradual las situaciones sociales que se le presenten de manera autónoma.
